INSPECCION EN ABBEY ROAD
Es por todos conocido el episodio que se vivió hace unos días atrás en la Municipalidad a causa de la clausura de un comercio de la calle 25 de Mayo al 600, donde la esposa del responsable del comercio, se encadenó a la puerta del despacho del Intendente, momento en el cual también se rompió un vidrio de dicha puerta.
El comercio en cuestión es un restaurante y cafetería y se clausuró, según la municipalidad por falta de habilitación y por varias denuncias de vecinos del lugar por el volumen de la música y los automóviles sobre la vereda.
Si bien el responsable del local, Alejandro Rolando, conocido comerciante de nuestra Ciudad ha manifestado en varias declaraciones tener todo en orden, el secretario de gobierno del Municipio, Dr. Armando E. Massera, aseguró que se carecía de la correspondiente habilitación.
De todos modos y a pesar de las declaraciones de Massera en relación a la falta de habilitación, el Municipio le concedió a los propietarios un plazo de 96 horas para poder trabajar y completar la documentación faltante, a su vez, encomendó a la Sub Secretaría de Control Urbano una inspección al lugar a los fines de constatar posible falencias.
Debe recordarse que la discusión de fondo no es la falta de la habilitación o el volumen alto de la música, el problema radica en que (según dicen los propios funcionarios municipales), “el lugar se pretende habilitar cono restaurante y cafetería cuando en realidad se esconde detrás la intención de transformarlo en un lugar bailable, algo que las normas actuales no permiten”.
El día 3 de diciembre se realizó en el lugar una inspección, en la misma se constató que “el comercio Abbey Road, de la calle 25 de Mayo 668 está dividido en cuatro sectores.
La zona de ingreso o parque, a la derecha, el salón principal con barra para atención al público, mesas distribuidas con sus respectivas sillas, puertas de ingreso a la cocina y los baños.
Cuenta con tres esferas giratorias. Luces led. Luces ultravioletas y diferentes luces octogonales y giratorias. En la barra hay una consola de sonido y un micrófono”.
Los inspectores elevaron un informe a la Sub Secretaría de Control Urbano, a cargo del Dr. Gustavo Marrone, detallando que en el lugar “hay un salón más chico, ubicado en la parte posterior, con barra, mesas y sillas”. Allí también detectaron una esfera giratoria en el medio del techo, consola musical ubicada a la derecha de la barra, con micrófono y dos parlantes de pié a la derecha del salón.
En la parte exterior de la propiedad, se encuentra una pileta de 6 por 2,50 Mts, con una profundidad de dos metros. “Sin cerco perimetral, siendo peligrosa para el público”.
Según el informe de los inspectores municipales, el titular del lugar fue consultado por las luces, parlantes y consolas, expresando que dichos elementos eran de su propiedad de su trabajo como DJ´s. Asimismo, los inspectores evaluaron que “dichos elementos dan lugar a transformar el establecimiento en un boliche o confitería bailable, modalidad que no concuerda con la habilitación solicitada, que es restaurante y cafetería”. Concluyeron.
En la foto, Alejandro Rolando y el sub secretario de Control Urbano, Dr.Gustavo Marrone.
